Escrito 1. APRENDIZAJE (20/5/22) Más allá de las heridas
He aprendido a parar cuando alguna emoción vino a avisarme que revise el camino… o los pasos.
Hoy caminan conmigo, vamos todas juntas, a veces se adelantan, a veces a la par, y últimamente, suelo girar con frecuencia la mirada hacia atrás, para asegurarme que ninguna se quede.
Cuando vamos todas juntas, hasta una lágrima refracta el arco iris en el cielo… y mi cuerpo me avisa que suelte el control.
Cuando se adelantan, observo hacia dónde me dicen que siga.
Cuando me olvido de alguna y se queda atrás vuelvo, le pido perdón y la abrazo con una luz blanca iridiscente que me llena de confianza para seguir con mis pasos.
Cuando hay mucho ruido en el camino, alguna de ella grita para que la escuche, me detenga, y sigamos juntas el viaje.
Cuando me conecto con mis emociones, el cuerpo danza alrededor de un fuego violeta, y asoman todo tipo de figuras, todo tipo de colores, a veces en noches claras, otras, oscuras y cerradas… sin embargo el ritmo de la danza invita siempre a ser yo misma, a perderme y encontrarme, a no saber, hasta arder el fuego dorado de la esperanza y la libertad.
Y seguir el camino.
Si me abraza el miedo, lo vivo con confianza.
Si se interpone el asco, limpio eso que no vi y me llevé por delante.
Si me acompaña la calma, mi alma se llama libertad.
Escrito 2 – EMOCIONES QUE HABITAN MI ALMA Y MIS DIAS. Haiku (8/6/22)
De su burbuja
escaparon a jugar.
Regresan a mí.
Llaves del alma
para todas mis cajas.
¡Éxtasis total!
Rompió la magia.
Asco. Ira. Enfado.
Pesada caja.
Calma, espera…
un dolor empático
despierta en mí.
Escrito 3. IMÁGENES. Haiku (8/6/22)
En el suspenso
del misterio nocturno
ella es presencia.
Velos del aura,
la perspectiva urbana
allí, gris, se pierde.
Puso espejos.
Arriba encontraron
Tierra y cielo.
Cartografía.
En el cielo, la Tierra
¿es un espejo?